En el Euro sub 21, que se ha disputado en Checoslovaquia, se han frotado los ojos al ver las evoluciones de un menudo portugués que juega por todos lados y que hace virguerías con el balón. Acaba de ser proclamado mejor jugador del torneo. El mejor sub 21 de Europa. Se llama Bernardo Silva, nació hace 21 años en Lisboa, se formó en el Benfica (club que lleva en el corazón) y juega en el Mónaco. Pertenece a Gestifute, la empresa de Jorge Mendes. En cambio, si preguntan en Francia, la sorpresa es más relativa. En la Ligue 1 ya están más acostumbrados a las jugadas de genio de Bernardo Silva que con el balón en los pies hace cosas de Lionel Messi (ver Youtube con Mónaco, vale la pena). Tiene, además, gol, cosa importante en el fútbol. Sabe jugar para el equipo con pases imposibles y le gusta rematar a la primera ocasión que tiene.
Con la sub 21 de Portugal juega un poco diferente que en el Mónaco de Leonardo Jardim . Con la selección de ‘As quinas’ que arrolló a Alemania y perdió la final ante Suecia en los penaltis, es el director de juego, se dedica más a dar balones a sus puntas, aunque no renuncie al remate desde la media distancia, una de sus especialidades. En el Mónaco se parece más a Leo Messi en el Barça. Cae, a veces, por la banda derecha, aunque tiene completa libertad para buscar ocasiones de remate. Su técnica es prodigiosa y, poco a poco, está mejorando su nivel físico, así como su capacidad de trabajo defensivo. En eso le ha ayudado mucho Leonardo Jardim.
Bernardo Silva tiene como referente a Rui Costa, el histórico centrocampista de Benfica y Fiorentina, campeón del mundo con Portugal sub 20. De niño pudo disfrutarlo poco, pero conoce al dedillo su trayectoria, de la que le han hablado su padre y abuelo, otros dos ‘enfermos’ del Benfica. Bernardo elogia y destaca a Pablo Aimar y Joao Moutinho, que los tuvo de compañeros en el Benfica y en el Mónaco y de los que dice que “aprendí mucho”. Llegó cedido al Mónaco por un año, en el 2014. Entró como sustituto del argentino Lucas Ocampos en el mes de agosto, nada más llegar. Su debut oficial fue ante el Guingamp en el mismo mes y su primer gol, nada menos, que el derbi frente al Olympique de Marsella. El Mónaco se dio cuenta de su calidad y se hizo con la ficha de Bernardo Silva de forma íntegra. No tardará en traspasarlo, tiene cola de pretendientes. El joven portugués es uno de los futbolistas más atrayentes en el mercado actual de toda Europa. Quizá su mejor cualidad es que acostumbra a tomar siempre la decisión más acertada en cada situación que se le presenta en el campo. Aunque su instinto le hace protagonizar jugadones de auténtico crack, con regates prodigiosos que entusiasman. Es todo un espectáculo, de veras