La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, la ex Presidenta de Chile Michelle Bachelet, ha visitado Venezuela. Caritas Venezuela ha publicado un Comunicado que aporta numerosos datos que, sin lugar a dudas, podrán ayudar a Bachelet a emitir un Informe lo más ajustado a la realidad que vive el país.

Caritas enumera siete desafíos cruciales: retraso en el crecimiento infantil, diáspora masiva, nuevas formas de esclavitud, crisis educativa, violencia estructural, crisis del Estado de Derecho y crisis medioambiental. Los venezolanos ya no son víctimas de una situación temporal de desabastecimiento de los recursos más básicos para su subsistencia. El país ha entrado en una fase de crisis estructural que afecta a la economía en los sectores primario y secundario, a la sociedad que carece de estabilidad sanitaria y educativa, a las relaciones sociales marcadas por la explotación, a las instituciones políticas marcadas por el abuso de poder, y al equilibrio medioambiental fruto de los desmanes extractivos.

Caritas pide a Bachelet que intervenga para que las ONG y la sociedad civil puedan recibir ayuda humanitaria, desaparezcan las fuerzas paramilitares y la ONU pueda abrir una Oficina de Derechos Humanos. Las cifras de las que Caritas Venezuela dispone justifican el despliegue de ayuda humanitaria bajo el amparo de Naciones Unidas. No se trata de una lucha ideológica, se trata de una lucha justa por la supervivencia de un pueblo sometido a estructuras de poder que ya nadie puede negar que sean injustas.