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Los apicultores impidieron el nacimiento de 80 millones de avispas asiáticas en Aller

Los trabajos para frenar la expansión de la invasora se desarrollan ya en otros municipios, como Mieres y Lena, con brigadas especiales

Jesús Tejón en las labores de retirada de un nido en Boo. En el círculo, un nido de vespa velutina en el polígono de Fábrica de Mieres.

La comarca se “blinda” contra la avispa asiática. La expansión de la especie invasora, que con la llegada del otoño se está acercando más a los edificios, obliga a administraciones y particulares a tomar medidas rotundas. Donde más avanzados están es en Aller: la Asociación de Apiculturores Alleranos han cazado este año a 8.000 reinas. Cada reina produce un nido, con una media de 10.000 ejemplares. Así son las cuentas: han evitado el nacimiento de 80 millones de avispas asiáticas solo en el concejo de Aller.

Los apicultores impidieron el nacimiento de 80 millones de avispas asiáticas en Aller

“Llevábamos ya tiempo anunciando que la avispa asiática supondría un problema de calado”, señaló el presidente de la entidad de apicultores, Jesús Tejón. Tanto para las cosechas de miel, ya que la especie asiática ataca a las autóctonas, como para las personas y el ganado (la picadura de la avispa asiática es más peligrosa que la de las locales). Por eso, en el concejo tomaron medidas hace ya tres años: “Fue entonces cuando nos pusimos ya con el plan de trampeo”.

Un plan económico y que requirió de la colaboración de un buen número de vecinos. Hicieron trampas para las reinas sencillas y eficaces: “Tan solo necesitamos una botella de plástico y llenarla con algo de zumo”. Las avispas reinas caen dentro, y mueren ahogadas.

“Solo así conseguimos controlar esta plaga, porque la formación de nidos es muy peligrosa”, destacó Tejón. Y añadió: “Cada nido cuenta con cerca de 10.000 insectos. Así que, en lo que va de año, hemos evitado el nacimiento de ochenta millones de avispas asiáticas”.

No es baladí. Los planes de trampeo se han extendido a otros municipios de la comarca, pero sin tanto resultado. En Mieres, cada año, una brigada se encarga de repartir “trampas” en lugares estratégicos del concejo.

En Lena, durante este ejercicio, velaron armas. Según anunció el gobierno local (IU), se ha creado ya una brigada específica para luchar contra la invasora. Se trata de una medida del Área de Seguridad Ciudadana, que dotará a miembros de la Agrupación de Voluntarios de Lena de medios para combatir la avispa velutina. “Estos voluntarios han recibido un curso de vespa velutina (avispa asiática) a través de la ESPPA (Escuela de Seguridad Pública del Principado de Asturias), adquiriendo los conocimientos y destrezas necesarias para neutralizar nidos de Vespa Velutina”, señalaron desde el gobierno local. La agrupación de Lena contará con el apoyo de voluntarios de Mieres, “colectivo que posee una amplia experiencia en intervención contra la velutina”.

Irán bien equipados. “Para desarrollar el servicio con absoluta seguridad, el Ayuntamiento está en proceso de adquisición de buzos de seguridad contra la avispa, y dispondrá de un dispositivo de aire comprimido que permitirá el lanzamiento de pequeños proyectiles impregnados con insecticida. El veneno, una vez disuelto en el nido, mata a los insectos y colapsa el nido”, explicaron ayer las mismas fuentes.

La avispa asiática llegó a la comarca, estiman los expertos, en el año 2015. Entró por todo lo alto: un allerano, que entonces tenía 53 años, fue el primer asturiano ingresado por la picadura de esta especie invasora. Desde entonces, apuntan los apicultores del municipio, “ya no ha dejado de dar sustos”.

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